25 09

Un hombre quiso mirarse por dentro


Un Hombre quiso mirarse por dentro y se sentò en el tronco de un àrbol
no era filosofo sabio ni eterno pero ese dìa sus ojos lloraron
como una estrella se abriò en dos el pecho
aunque por poco se quema las manos
quiso dejar que los rayos del viento le devolvieran su imagen de humano

quiso mirar y encontrò él paraìso
quiso mirar y encontrò él infierno
quiso mirar lo que siempre nos duele
quiso mirarse por dentro

cuando yo sea hormiga gigante
transformadora de cosas y nombres
con mis tenazas peinarè las nubes
pero prometo no aplastar al hombre
tiene cupido mala punteria
tiene una flecha y dos corazones
si se equivoca pierdo la cabeza
solo que salva ser niño o paloma

quiso mirar y encontrò él paraìso
quiso mirar y encontrò él infierno
quiso mirar lo que siempre nos duele
quiso mirarse por dentro

yo opino que el amor no es una linea
yo opino que el amor no es un esquema
la soledad puede ser abitable hasta ese dìa que todo revienta
si plantas flores pregunta primero si eres capaz de cuidarlas a diario
de lo contrario vete jardinero cambia de oficio sigue de largo

quiso mirar y encontrò él paraìso
quiso mirar y encontrò él infierno
quiso mirar lo que siempre nos duele
quiso mirarse por dentro

un hombre quiso mirarse por dentro y se sentò en el tronco del mundo
no fuè un capricho fuè algo muy serio
como los sueños de un naufrago mudo
si se deciden hacer este viaje
lleven estrellas marinas y agrarias
un sol cuadrado color escarlata
y allì estarà nuestra aldea planetaria

quiso mirar él paraíso
quiso mirar él infierno
quiso mirar lo que siempre nos duele
quiso mirarse por dentro

Jose Antonio Quesada


Como un héroe, un hombre sencillo, un dios; llevo en la mano izquierda un bastón de brotar y en la diestra un león poderoso, montura de batalla silenciosa desde donde blandir el cayado, tibieza sobre la cual dormir cuando arrecia el frio.

He querido mirarme por dentro, y me encontré erguido, apoyado sobre un báculo moreno cubierto de musgo y caracoles, con una fuente manándome de la boca y mi perro a los pies, de ojos cerrados pero vigilante.

"...Los muertos son estrellas que no tiene revés..." Silvio Rodriguez